viernes, 15 de abril de 2011

como se derrama la cera y aquí estamos
tú y yo cayendo como nieve de un cedro
tenemos las yemas de las manos
rígidas y ásperas y tocamos tantas
veces sin notar al momento

necesitamos un tiempo sí un
tiempo para ver el surco
y su sentido
huella en la transparencia

Cartero

Tomando por axiomas de lo eterno y por indefectible verdad las inspiraciones de una razón necesariamente falible, arrastrados por la opinión general, subyugados por la religión de los textos, han establecido el principio, a imitación de los teólogos, de que es infaliblemente verdadero lo que es admitido constante y universalmente, como si una creencia general, pero irreflexiva, probase algo más que la existencia de un error general. No nos engañemos hasta ese extremo. La opinión de todos los pueblos puede servir para comprobar la percepción de un hecho, el sentimiento vago de una ley; pero nada puede enseñarnos, ni sobre el hecho ni sobre la ley. El consentimiento del género humano es una indicación de la naturaleza; no, como ha dicho Cicerón, una ley de la Naturaleza. Bajo la apariencia se oculta la verdad, que la fe puede creer, pero sólo la reflexión puede describir. Este ha sido el objeto del progreso constante del espíritu humano en todo lo concerniente a los fenómenos físicos y a las creaciones del genio; ¿para qué nos servirían si no los actos de nuestra conciencia y las reglas de nuestras acciones?

-Toma, lo escribí hace tiempo. Algunos se creerán que... bah! demasiado saben a qué me refiero.- Me da el papel y yo lo echo al buzón.

lunes, 11 de abril de 2011

llegado el naufragio
cómo haremos para juntarnos qué
que seamos solícitos
y señal veamos y señal seamos

no será la fina manera y decorada
reja ante el yo
no será el modal suave menos el pacivo
arrastrado el mueble tendrás
la mano ávida el medio furioso

si acostumbrada y curtida
la relación no huye de la herida
-la carne hiende la carne-
tendrás vislumbre nuestra sabiéndote palpar el desgarro

la misma generación nos reconstruye
nos preste la condición de vivientes

miércoles, 6 de abril de 2011

el gran incendio
le pegaron fuego
pluto sintió con escozor cómo las partes volvían a su boca

propagación del fuego
como un sermón sin pausa
por el lomo dejando en ascua la sal ceniza
por el lomo ampliando el espectro
saciando la necesidad de correr
procesión del nervio

respira ahora amigo
fue esto o fue el naufragio
del gran incendio sea lo que sea
vendremos